Siguen las decepciones en Naruto

No me gustaría que mi blog se convirtiese en una crónica del manga de Naruto, pero ya que está en un momento de la historia tan decisivo y que, además, el autor la está cagando del todo, no puedo evitar hacer comentarios sobre lo decepcionante que me está resultando las últimas decisiones que Kishimoto ha tomado en estos últimos capítulos.

Pues tal y como os habreís imaginado por el título, el capítulo 600 ha sido otra decepción.
Por dos razones, el primero porque la mayor parte del capítulo es un flashback, pero no uno que nos aporte cosas nuevas, todo lo que vemos es de la Kakashi Gaiden, tal cual la leímos en su día. Así pues, la mayor parte del capítulo es algo que ya habíamos visto y que todos nos acordábamos, ya sea por buena memoria o por releernos esa parte al descubrir la semana pasada quién estaba tras la máscara.

La segunda razón es debida a la única información nueva que nos da el autor y es algo importante, ni más ni menos que los motivos por el cuál Obito hace lo que hace. Mirad la imagen y ahora comento lo que me parece:

Original ¿verdad?

Es algo que ya veía venir, pero aún así, vamos a ver Kishi, ¿me estás diciendo que hay una guerra en la que han muerto cientos de personas y de que para llegar a dicha guerra han tenido que morir otras tantas, porque muere el amor de la infancia de un niñato de mierda?

Tobi, un personaje interesantísimo a lo largo de toda la serie, tiene un plan con un objetivo enrevesado y unos métodos más enrevesados todavía. Ahora descubrimos que todo es por el más absurdo de los motivos y su identidad la más facilona. Así es como pasa un personaje de significar tanto para mí a perder por completo mi interés y seguramente el de muchos.

Pues bueno, de momento Kishimoto no se ha puesto aclarar todos esos errores temporales que no nos encajan pero aun así ha sabido como cagarla más. Lo único decente del capítulo y por lo que tengo algo de esperanzas para el futuro de la serie, es la última viñeta. Espero que después de mi perdida de interés por Tobi, el peso del final caiga en Madara.